SAMAD RAHEEM GUERRA
Emeryville, California, Estados Unidos / Diáspora Africana
~ Mi movimiento es la resiliencia ~
Foto: Olivia Eng
“Veo las cicatrices de mi cuerpo como marcas de belleza porque acepto las experiencias que me han marcado como pruebas de mi fuerza y resistencia”.
“Si muevo los dedos de los pies lo suficiente, tal vez se salga el yeso, me pregunté. Después de intentarlo varias veces sin suerte, suspiré y me senté en mi cochecito. Nadie estaba cerca para ver mi frustración, así que finalmente pasó. Miré hacia la calle donde algunos niños jugaban y una sonrisa comenzó a formarse en mi rostro. Encontré cierto placer al verlos disfrutar del aire libre, aunque pasarían meses hasta que pudiera unirme a ellos. Aunque no recordaba lo que le sucedió a mi pierna, ciertamente sabía que no debía estar sentado en un cochecito. Después de un tiempo, intenté mover los dedos de los pies de nuevo y sentí una sensación de hormigueo en los pies ".
Samad Raheem Guerra S.C.A.R.S. Story (Emeryville, Ca, USA)
BAÑARSE EN SILENCIO
"Me he acostumbrado a los ruidos dentro de mi cabeza
Me ladran
Lanzar epítetos
Estrecharme
Mientras ensancho mi carga
De trabajo voluminoso ningún hombro debe esforzarse para llevar
¿Por qué insisto en escuchar cuando no se dice nada?
Entonces me baño en silencio como si fuera mi última limpieza
Pelando cada artículo de sonido de mi cuerpo
Fonema por fonema
Hasta que las reverberaciones de quien ya no soy yacen en el fondo
¡Amplifica eso!
¡Amplifica eso!
¡Amplifica eso!
¡Y tócalo fuerte para que lo escuchen mis ancestros! "
Foto: Tyrone Domingo
Samad Raheem Guerra es un artista escénico multidisciplinario y educador artístico con sede en el Área de la Bahía de San Francisco. Recibió su BA en Artes y Culturas Mundiales / Danza de UCLA en 2014. Durante este año, también recibió una beca Fulbright-Hays Group Projects Abroad para estudiar la cultura árabe Gnawa en Marruecos. Colaboró con artistas locales en un proyecto multimedia que apareció en su trabajo de tesis. Desde que se graduó, ha trabajado como artista docente, director de programas en un refugio para jóvenes sin hogar y ha realizado giras internacionales con CONTRA-TIEMPO Urban Latin Dance Theatre. También se ha presentado en el Hollywood Bowl y el Anfiteatro Ford con Viver Brasil y Sergio Mendes, y coprodujo su propio trabajo en el LACMA, Main Museum en el centro de Los Ángeles, Hamburger Bahnhof y Daadgalerie en Berlín, Alemania.
En 2017, Guerra comenzó a colaborar con su amiga y artista Olivia Eng, quien, en 2012, desarrolló SCARS (Fuerza, Coraje y Resiliencia del Alma); un proyecto multimedia con la misión de resaltar el poder del arte para ayudar a superar y curar el trauma. Después de una lesión traumática en la pierna que resultó en un daño nervioso severo a la edad de 2 años, Guerra tuvo un pie caído, lo que dificulta el equilibrio y la dorsiflexión. Mientras trabajaba en estrecha colaboración durante más de un año, Guerra pudo contar su historia por primera vez, grabarla y archivarla en la base de datos de StoryCorps y lanzar un documental sobre su experiencia titulado “Mi movimiento es la resiliencia”. Fue el primero de una serie de documentales que se producirán el próximo año. La participación de Guerra en el proyecto ha sido una experiencia que le cambió la vida y está muy agradecido. Desde el lanzamiento de la película, ha recibido un gran apoyo y ha elogiado su valentía al contar su historia.
Cuando Guerra no está enseñando o trabajando en proyectos de arte, disfruta pasar su tiempo libre en la naturaleza, en la playa y con sus seres queridos. Le resulta muy curativo estar en la naturaleza y realiza caminatas donde puede escapar del ajetreo y el bullicio cotidiano de la vida en la ciudad. Una gran parte de su práctica curativa también incluye la sudoración, que implica la oración, la meditación y el uso del tabaco como planta medicinal. Estar dentro de la cabaña de sudor lo ha ayudado a recuperarse del trauma de la infancia y a conectarse con su propósito superior en la vida, que es trabajar con los niños y hacer arte que inspire cambios y crecimiento positivo. Está muy agradecido con la comunidad de ancianos y maestros navajos que lo introdujeron en la práctica y continúan siendo una fuente de inspiración y luz.